El vanos es un sistema de control variable de la válvula de admisión y escape que forma parte del motor de un coche. Fue introducido inicialmente por BMW en 1992 y se ha perfeccionado a lo largo de los años, con la intención de mejorar la eficiencia del motor, la potencia y el consumo de combustible. Este sistema ajusta automáticamente el tiempo de apertura y cierre de las válvulas de admisión y escape en función de las condiciones de manejo, lo que resulta en una mejora en el rendimiento del motor.
Índice de contenidos
Historia y evolución del sistema vanos
A principios de los años 90, debido a la creciente demanda de motores más eficientes, se necesitaba un sistema que pudiera ajustar automáticamente el tiempo de apertura y cierre de las válvulas para optimizar el rendimiento del motor. Así nace el sistema vanos. La principal finalidad del vanos ha sido siempre la misma: optimizar el rendimiento del motor mediante la modificación constante y precisa del tiempo de apertura y cierre de las válvulas en función de las condiciones de conducción. A lo largo de los años, este sistema ha evolucionado, haciéndose más sofisticado y efectivo.
Ventajas del sistema vanos
Para los propietarios de coches equipados con un sistema vanos, las ventajas son claras. Además de la mejora en la eficiencia del motor y la potencia, también se mejora la economía de combustible y las emisiones de escape. Adicionalmente, los coches equipados con vanos tienden a tener una mayor respuesta del acelerador, proporcionando una experiencia de conducción más deportiva y emocionante.
Inconvenientes del sistema vanos
Cada sistema tiene sus desventajas, y el vanos no es la excepción. Este sistema es más complejo y puede ser más costoso de reparar si falla. Además, si no se mantiene adecuadamente, puede causar problemas de funcionamiento en el motor.
Coste de reparación y mantenimiento
El coste de mantenimiento del sistema vanos depende de la marca y el modelo del coche. En promedio, el coste de la reparación puede oscilar entre 500 y 1500 euros, lo que puede considerarse una cantidad considerable. No obstante, los beneficios a largo plazo, como el ahorro en combustible y las menores emisiones, tienden a compensar este coste inicial.